lunes, 17 de junio de 2013

Euskal Herria Mendi Erronka


Euskal Herria Mendi Erronka
Km: 65
Desnivel: 3.500 m
Lugar: Leitza

Seis, sí, seis son los días que han transcurrido desde mi última carrera (Maratón Zegama Aizkorri). Ya lo sé, ya, es demasiado, no voy a recuperar, me pasara factura... pero a cual renunciarías tu? a la maratón de las maratones o a la primera edición de una ultra organizada por Esait en un entorno tan atractivo como Leitza?

Lo reconozco, es demasiado, pero no solo esto último, sino toda la tralla de carreras que llevo, en menos de mes y medio, exactamente 293 km en competición, uff !!!

Bueno, pues si en Zegama tenía mis dudas sobre si podría acabar la maratón por problemas en el soleo, aquí en Leitza mis molestias eran en el cuádriceps derecho, ya en Zegama en los últimos km note molestias. Está claro, cuando fuerzas demasiado la maquina, empiezan a saltar las piezas por todos lados.

Llega el día de la prueba, vamos 4 del equipo y a decir verdad, si antes me gustaba llegar con tiempo de sobra, hablar con la gente..., ahora prefiero llegar lo más justo posible, hablar con el mínimo de gente y cuanto antes empezar a correr.

Línea de salida, me junto con uno de mis favorito, Endika Gartzia, saludo a más gallos Imanol Aleson..., conozco a Patrice Loco, Atarratze (seguidores habituales del blog...).



Después de un pequeño imprevisto por la organización (se le ha deshinchado justo a las 7 am el arco de salida) se da inicio a esta primera edición con una meteorología que desde primera hora nos advierte de que no nos va a poner las cosas fáciles.

Como era de suponer, se sale fuerte, hay que tener en cuenta que nos enfrentamos a 65 km, por lo que es casi seguro que habrá muchos maratonianos que se lancen por primera vez a una ultra en esta carrera y ello conlleva que estos le den una alegría a la carrera desde el primer kilometro.

La estrategia de carrera es clara, si miráis el perfil, hasta el km 29 aproximadamente hay mucho desnivel de ascenso (incluido un km vertical), para luego poderle meter caña. Así que habrá que aguantar el tipo hasta el 29 y luego apretar hasta donde se pueda.




Una vez pasados los primeros km me doy cuenta de que hay más gallos de lo que pensaba, unos 5 corredores han tirado para adelante entre los que únicamente sé que esta Endika, lo cual no me sorprende. Yo estoy en un segundo grupo con Imanol Aleson, Luis Lasa, Ion Aspiroz, Parice Loco y algún otro.

Después de un pequeño ascenso a Guratz y descenso por Gorriti, me empiezo a preocupar por mi aductor. Llegamos al km 16, Gaintza, donde nos presentan un km vertical el cual hay que tomárselo con mucha, mucha tranquilidad.




Saco los palos y empiezo el ascenso sin prisa pero sin pausa, marcando ritmo pero teniendo en cuenta que queda mucho. El frio, el viento, el barro y la lluvia hacen que el ascenso se complique. Voy en solitario, aproximadamente entre el 5º y 10º, llevo el dorsal en el muslo pegado a la malla ya que si lo llevaba en el pecho, al llevar el cortavientos por encima no se me iba a ver, pero al llevarlo en el muslo cualquier rama o arbusto que te roza te suelta el dorsal, lo que hace que me tenga que parar a intentar, repito, intentar ponérmelo bien ya que al tener las manos insensibles por el frio me lo hacen muy difícil.

El entretenimiento de ponerme el dorsal hace que me adelante Pedro Etxeberria, intento pillar rueda y llegamos arriba, Irumugarrieta 1.431 m.

El frio, la lluvia y el viento me hacen recordar imágenes del UTMB, salvo allí, nunca había pasado tanto frio en carrera como esta vez y nunca había llevado tanta ropa. Pasamos el control mientras intento plegar los bastones. No puedo, no siento los dedos. Tengo que meter un botoncito que tiene el bastón para que se plieguen pero soy incapaz. Lo intento con una mano, lo intento con dos a la vez, pruebo con una piedra pero finalmente lo consigo con los dientes.

Me los engancho en el cinturón y tiramos para abajo por un trazado bastante técnico. Cuesta abajo el cuádriceps derecho me molesta, lo que hace que no baje con tranquilidad ni soltura.

Mierda, me percato que solo llevo un bastón en el cinturón, por lo visto, debido a la insensibilidad de las manos no he debido de meterlos bien por la goma y se me ha debido de caer. Miro para atrás, vienen Imanol Aleson y compañía:

"Habéis visto un palo por ahí? les pregunto.
"No" me contestan mientras me adelantan.

Mierda, ni me lo pienso un segundo y me olvido del palo. Me uno al grupo e intento no perder rueda aunque estoy haciendo la goma de seguido molesto e intranquilo por mi pierna. Si no va a más, puedo seguir aunque en las bajadas no puedo forzar.

La carrera avanza, hemos hecho grupeta y poco a poco las zonas técnicas desaparecen para correr por senderos con hojas, terriblemente embarrados pero mucho mas seguros que danzar sobre piedras.

Llegamos a otro avituallamiento de Unagako Putzua, km 23, entro en la carpa y  sin percatarme de que estaba Endika me dice:

"Que tal vas?"
"Bien" le contesto sin apenas darme cuenta de que ese no era su sitio.
"Me retiro" me dice
"Venga, ven conmigo" le contesto mientras repongo en el avituallamiento
"Que no, que yo así no sigo" me comenta refiriéndose al frio.
"Venga, vamos, venga Endika cojones" le pepito mientras marcho del avituallamiento

Tiro para adelante, no le veo del todo convencido, miro para atrás, esta dudando y noto como los del avituallamiento le están animando, duda:

"Venga cojones, Endika ven" le pego un berrido que le hace decantarse.

De nuevo hacemos grupeta y vamos unos 6 corredores: Endika, Imanol, Ion Azpiroz, Luis Lasa, Patrice Loco y algún que otro.

La grupeta nos viene a todos de perlas y el ir bajando poco a poco de altura hace que nuestros cuerpos ya no estén tan fríos. Me doy cuenta de que en breve llegamos al 30 donde según mi estrategia habría que cambiar el ritmo. Aprovecho el sube y baja para comer todo lo que tengo que comer (Gatosport de Overstim) para hacer un poco masa, geles, bebo y mientras voy haciendo la goma, ya que tengo que andar buscando cada cosa en un bolsillo diferente, nos acercamos al avituallamiento de San Miguel.



A pesar de hacer un tiempo de perros allí se aglomera bastante cantidad de aficionados, la hinchada desde luego no falla (aita, ama y los suegris, Eneritz esta de bodorrio) y saludo a Imanol Goñi que se esconde debajo de un paraguas. Hago una breve parada en el avituallamiento, bebo agua y mientras la grupeta se queda reponiendo todo tipo de alimento, yo tiro para adelante.

"Que tal vas?"
"Bien"

Paso por delante de Maribel y le digo "ahora empieza la carrera".

Dicho y hecho, tiro para adelante ni corto ni perezoso, no sé ni con que intención pero lo que tenía claro era que aquí había que cambiar de ritmo, no sé ni en qué puesto voy, ni a cuanto están los de adelante, ni si van juntos o separados pero yo me encuentro bien.

No llevo ningún tipo de referencia de en que km están los avituallamientos ni nada pero lo que sí sé, es que miro para atrás y no me sigue nadie y que por adelante tengo uno a pocos minutos.

Dicho y hecho le doy caza y le adelanto.

Pregunto en qué puesto voy a un voluntario, me dicen que 4º, me motivo de manera exponencial, mi cabeza mira al podium, voy a por él. Reitero la pregunta a otro aficionado, me dice que 5º, cagüen la puta!!!, poneros de acuerdo. A mi cabeza no le gusta este cachondeo y me tiene que quedar claro. De nuevo pregunto y me lo confirman, 4º y no solo eso sino que el 3º no le tengo lejos.

Aprieto, quiero subir al pódium, me encuentro bastante bien, estoy casi seguro que los que van por delante no son habituales de las ultras sino, les conocería y esto quiere decir que es muy fácil que se les haga largo.

Le veo, sí, le veo, el ritmo no es muy elegante, guardo distancia para recuperar y cuando llegue el momento de pasarle dejarle clavado si es posible. Incluso hecho una meadilla, prefiero echarla antes de pasarle que no perder tiempo una vez adelantado y que me recorte distancia. Me acerco, tomo un gel, bebo agua, me acerco, el todavía no me ha visto, recupero un poco. Justo llegamos a Lekunberri, km 43 y avituallamiento en la estación de tren. Hay mucha gente, entre ellos los míos. Los plausos, ánimos y gritos me ponen las pilas y en un alarde de chulería (no muy recomendable) ni paro en el avituallamiento y cojo de pasada únicamente una trozo de naranja. Esto hace que le alcance al 3º, le paso e intento acelerar el ritmo para que lo antes posible me pierda de vista.

Aprieto, aprieto, aprieto, pienso en positivo, levanto las piernas, intento alargar la zancada, miro adelante, venga Gaizka, venga, lucha por el podium !!!



Apenas han pasado unos km cuando de nuevo me encuentro con los míos:

"Venga Gaizka que le has dejado" me animan.
"Que tal vas?" me preguntan.
"Bien" les contesto mientras avanzo por un pequeño cuesta corriendo.
"El segundo te saca 10 min y el primero a media hora" me informa mi aita.
Ni le contesto pero mi gesto le hace entender que  no pienso ahora mismo en ello.
"¿Le podrás coger?" me pregunta mi aita.
"Buff, eso es otra guerra" le contesto.
"Venga que sí, puedes..." me anima mientras me alejo.

Pero este está loco, pienso para mis adentros, todavía no he asimilado y consolidado que voy 3º y ya quiere que piense en el 2º que está a 10 min.

Quiero que llegue el km 50 para tomar mi último pero se me está haciendo largo y antes de que llegue soy precavido y repongo energía.

Me veo fuerte, me veo cómodo pero se están alargando los km demasiado.

La organización ha modificado el recorrido y lo ha alargado 5 km (de 60 a 65 km) y me consta que ha metido una tachuela que a esta altura de carrera, toda tachuela es montaña.

Cojones, le veo al segundo, algo inesperado, le miro como va, al igual que con el 3º quiero pasarle y dejarle pero a estas alturas la táctica se complica.



Estamos subiendo, zancada larga, bueno lo más larga que me deja mi 1,69 m, las manos en las rodillas, levando la cabeza y cuando le voy a pasar aprieto los dientes si se puede un poco más. Procuro dar imagen de sobrado pero las sensaciones no son iguales. Echo a correr donde en otra situación andaría, aprieto los dientes, menos mal que no me ve la cara, de nuevo las manos en las rodillas, aprieto, aprieto, sigo, la niebla me facilita que desaparezca de su vista y continuo este matador ascenso.

Parece que le he dejado pero no tengo que bajar la guardia, los km no pasan y me centro en correr y en no cometer error, alimentación, marcas...

Me doy cuenta de que necesitare otro gel para estos últimos km pero se me ha acabado el líquido, no me puedo arriesgar a tomármelo sin agua. Espero, el próximo avituallamiento tiene que estar al llegar, me noto con necesidad de agua, no llega, miro para atrás cuando puedo coger referencias de larga distancia, no le veo, continúo, necesito agua...



Veo un patrol, bien !!!, será un avituallamiento liquido, me tomo el gel antes de llegar. No!!!, son aficionados, no es un avituallamiento, mierda, me obsesiono con el agua, me da miedo que me deshidrate, más aun al acabar de tomar el gel sin liquido. Tiene que tener que llegar ya, empiezo a pensar en tener que recurrir al agua de algún riachuelo o algún charco sin barro pero el barro es omnipresente.

Por fin, avituallamiento, agua, me lo tomo con "tranquilidad", bebo vaso y medio y tiro para abajo como loco.

Estos últimos 7 km son una pesadilla, el ritmo es bueno, tengo buenas sensaciones, veo difícil que me alcancen por detrás los dos que he adelantado pero tengo miedo de que Endika, Imanol o Pedro vengan con fuerza desde atrás. El mirar hacia atrás es una constante, no tengo referencia, no se cuanto le saco, se que por delante no tengo nada que hacer. Miro el reloj y me vengo arriba cuando veo los números por debajo de 4 minutos el km.

Poco a poco esto se va acabando, miro para atrás, no veo a nadie, ya no queda nada, esto ya está hecho, me visto de gala, saco la txapela del camelback, me la pongo y me relajo este ultimo km.



Llegamos a Leitza, vallas a ambos lado, mi euforia no la reprimo, salto, grito, animo, le veo a mi ama en mitad de la carretera, me paro, le abrazo, al de unos metros lo mismo hago con mi aita (ellos no se lo esperaban, pensaban que iba 3º), alegre, contento, eufórico y muy, muy feliz, aprieto los puños, los levanto, le abrazo a Ángel y cruzo la línea de meta en 2ª posición con tiempo de 7 horas 4 min.

Muy, muy contento, echaba de menos una remontada de estas, de las que me gustan, de las que mucha gente se acuerda como en Hiru Handiak o en UTMB, creo que he hecho una muy buena estrategia de carrera.
Entrevista para Euskadi Irratia "Hiru errege mahaia"



1º Angel Arrieta   2º Gaizka Barañano   3º Iñaki Martiarena





30 minutos de reportaje, en los que para el que no quiera verlo entero, salgo en:

2.39 voy de gris arriba
3.16
6.58
7.10
9.30
15.14
19.47

7 comentarios:

Juanan dijo...

Desde Angers, un fuerte abrazo y una dosis de profunda admiración por tu gesta. Aupa Txapel!

@Frogpeacemaker dijo...

Bueno, impresionante una vez más... y eso que en esta ocasión no te extraviaste, aunque hay que reconocer que la anécdota de plegar el bastón con una piedra o con los dientes (uy, si los diseñadores de Raidlight leen eso, les da un patatús) tiene el clásico "sabor Barañano".

En fin, como siempre, aunque suene algo manido, enhorabuena por el éxito. Con la proximidad de Zegama y con el mal tiempo que hacía en Leitza, a mí me parece una auténtica proeza. Pero habrá que empezar a decir que "Txapel is Txapel".

Termino con una anécdota. El viernes estuvimos en la recogida de dorsales en Leitza. Cuando ya nos íbamos llegaba la armada de Amurrio. Saludé brevemente a Txapel, le pregunté si estaba recuperado de la semana anterior, él contestó "A ver, a ver" y yo zanjé, dirigiéndome a todos los presentes: "Bueno, entonces diez primeros, o qué". En realidad la anécdota es la que sigue: mientras me alejaba, empezó a adueñarse de mí un poderoso sentimiento de vergüenza, porque temí que Txapel se hubiese tomado como un menosprecio mi alegre pronóstico de "SOLAMENTE entre los diez primeros". A estos extremos, señoras y señores, hemos llegado con este peligroso elemento...

Anónimo dijo...

¡¡¡Una vez más has conseguido superarte, Gaizka!!! Y cada día me gustan más tus crónicas de las carreras con todo el entusiasmo y dedicación que las haces. Cuando las leo, es como si estuviese corriendo al lado tuyo, jajaja.... Es una sensación muy bonita porque haces que el leer la crónica sea muy ameno e instructivo. ZORIONAK TXAPEL!!!

Unknown dijo...

Enhorabuena, magnifica cronica, fue todo un honor poder compartir varios kilometros contigo, a ver si nos vemos en la salida de la G2H, esa me la voy a tomar con mas calma.....
Por cierto se te ha "pasado" mecionar que ese dia tambien te confundiste de camino, subiendo a San Miguel, yo me habia quedado rezagado del grupo junto con otro y derrepente por sorpresa aparecisteis por detras.
Ale a entrenar.....
Agur.

Txapel dijo...

Frogpeacemaker no sabia que tu habias sido el que me comentaste eso, haberme dicho :-(

Patrice loco, chivato ;-), fueron unos pocos metros, aunque lo reconozco nos perdimos unos cuantos jejeje

@Frogpeacemaker dijo...

AHIVA LA LECHE... ¿También te hiciste "un diez primeros" en la Traveseriña? Joder, macho, danos un respiro: se nos van a quedar las palmas de las manos en carne viva...

Maldito crack.

Belin dijo...

Eres el mas grande Bara!! En esta crónica me quedo con la técnica de adelantamiento y las dotes de actor :-P Pero como te dicen por ahi... una nueva cronica con el inconfundible sabor a Barañano!!