Sábado 3 de mayo de 2014, 6 a.m,
Ultratrail Apuko Extrem, 88 km y 6.000 metros de desnivel positivo, si esto os
parece poco, que no lo creo, le sumamos una añadido que la hace un tanto
especial, I Campeonato de Euskal Herria de Ultratrails.
Por primera vez en mi vida me presento a una
carrera con el dorsal numero 1 pinchado en el pecho, con muy buenas sensaciones en los últimos entrenamientos
y con ganas de quitarme la espina de la primera carrera importante de la
temporada 2014, Transgrancanaria advanced (pido disculpas por no haber escrito crónica pero por diferentes
motivos…).
Saludos a corredores, organizadores y demás... cuatro excusas, cuatro
mentiras, cuatro advertencias y a las 6 de la mañana da inicio este rompe
piernas que como veis en el gráfico se podría dividir en 6 partes, acumulando
el mayor desnivel en los primeros 30 km.
Primeros kilómetros de carrera de
noche, la salida para mi sorpresa sale bastante rápida, me despisto un par de
minutos con algunos ajustes del reloj-gps y para cuando me doy cuenta 4 luciérnagas
ya han tirado para adelante.
Miro para los lados, quiero ver de quien estoy
rodeado, acelero el ritmo, adelanto a algún que otro corredor hasta ponerme a
rueda de Imanol Aleson. Recupero medio
minuto y tiro para adelante para no perder de vista e intentar dar caza a los
cuatro de cabeza.
Les doy caza, no les conozco, no creo que sean
vascos (en esta carrera hay dos frentes, la clasificación general y el
Campeonato de Euskal Herria), miro para atrás no veo al resto cerca.
Pequeñas conversaciones que mantenemos les delata
que son paisanus asturianus ;-), por lo menos dos de ellos.
“Habras traído patxaran?” me pregunta uno de
ellos.
Ups !!! voy en desventaja, me conocen y yo a
ellos no. Carcajada y tiramos para arriba.
Esto no puede quedar así, “que sois,
asturianos?” le pregunto.
Mis sospechas son que dos de ellos si pero el
tercero, no lo tengo tan claro.
Le miro al tercero, le deslumbro con el
frontal y le pregunto “y tu?, catalán?” le pregunto y me auto contesto antes de
darle la oportunidad a él.
Parece que la conversación no quieren que vaya
más allá, pues vale, vamos a lo que hemos venido.
El catalán, que en meta me entero que se llama
Josep Cuadrat tira para adelante y yo chupo rueda.
Se hace de día, frontal fuera y después de 1 h
10 min de carrera coronamos Gallarraga, km 8 de carrera con muchas ganas de
hacer el descenso y llegar al primer avituallamiento en La Quadra (km 17) donde
estará la hinchada.
En el descenso Josep y yo nos hemos
distanciado un poco de los asturianos y dejo que lleve él las riendas para
observar como baja. En la mitad del descenso tomo la iniciativa, me siento cómodo
e intento apretar un poco para tantear como esta el percal.
|
Foto de Mendibeltz |
Llegamos a La Quadra, le veo a mi aita, al
resto más les oigo que les veo ya que voy centrado en el avituallamiento: un
trozo de plátano y agua.
“Begiratu zenbakia!!! (mira el numero!!!)” le
grito a mi hermano para que me pase informes del catalán.
Javi Laburu (mi entrenador) esta unos metros
más adelante:
“¿Qué tal?” Me pregunta con aparente
tranquilidad aunque lo pongo en duda.
“Bien” le contesto más con un gesto que con
una palabra.
Miro el reloj, uff, 1 hora 55 min, 14 minutos
mejor de lo esperado.
Pequeña subida, pequeña bajada, km 21, sé que de
nuevo están los míos:
“4:33 en Zegama” me grita mi hermano como dato
relevante de Josep. Con eso me basta y me sobra (en meta me entero que 4:29 fue su mejor tiempo en Zegama), si le aguanto el ritmo, bien y
si me fuerza mucho que tire para adelante que calidad tiene de sobra y con un
poco suerte se le puede hacer larga la carrera.
Nos enfrentamos a la subida al Eretza, parte
importante de la carrera, 800 m + en poco más de 4 km, vamos una subida de las que dejan huella.
Josep marca un ritmo exigente, su ritmo es
fluido, no deja de correr. Voy en cabeza de carrera pero hay que tener sangre
fría y dejarle marchar.
Después de cerca de 50 min, corono el Eretza
con 3 h 9 minutos de carrera, me sacará unos 5 minutos pero no me preocupa, yo
tengo que hacer mi carrera. Una vez arriba, tomo referencias de los dos asturianos
que vienen por detrás y les saco más de 10 minutos.
Tiro para abajo, ni rápido ni lento,
protegiendo cuádriceps, sin forzar mucho, estas bajadas tan empinadas te pueden
hipotecar la carrera. Sería interesante hacer un estudio de los mayores motivos
de abandono y dolencias en las ultras, estoy convencido que son problemas
estomacales y cuádriceps.
|
Sodupe |
Km 31 de carrera, 3 h 41, avituallamiento de
Sodupe, de nuevo la tropa me anima e informa de cómo va la carrera.
“Te saca 10 min, va muy fresco, por detrás dos asturianos, les sacas bastante, primer vasco Imanol, lo tienes a más de 10
minutos” me informan mientras lleno agua y cojo un trozo de plátano.
La carrera va bien pienso para mis adentros,
un gallo (en el argot ultrero quiero decir un corredor rápido, con calidad) va
por delante, saco 10 minutillos al segundo, las sensaciones son buenas, estoy
regulando, la hidratación y la comida va todo en orden, así que, mejor
imposible.
Antes del km 55 Javi aparece por el monte:
“Que tal vas, el catalán va como un avión,
regula, come, bebe…, como vas de pulsaciones… a los de atrás les sacas más de
10 minutos…”
Le pregunto por los asturianos (uno de ellos
debió de quedar 3º en la Travesera y me da mucho miedo, los asturianos son
duros y bravos) y por Imanol Aleson, siempre que esté Imanol en una carrera hay
que mirar constantemente por el espejo retrovisor, si los asturianos son duros,
los giputxis más y encima de Azkoitia y bombero, tela ;-)
Avanza la carrera, después de coronar el Espadaseca llego al avituallamiento de Zalla, km 55, 6h 23 min, allí tenemos la bolsa de
corredor donde podemos cambiarnos de ropa, calzado, coger comida que nosotros
hayamos dejado…
Entro en la carpa, control de material, lo
saco todo (manta térmica, camiseta térmica, frontal, pilas de repuesto, luz
trasera, móvil…) mientras los jueces me revisan todo lo que he sacado Eneritz
esta a mi lado:
“Si quieres te cojo el frontal o algo que ya
no vayas a necesitar para quitarte peso” me comenta Eneritz.
Nos reímos y el juez le explica “tiene que
llevar todo el material hasta final de carrera sino hay penalización” ;-)
La jefa, Eneritz, trampas, lo que son trampas
no quería hacer, más que nada porque sino no me lo propone delante de los dos
jueces jejeje.
Cuantas veces les habré comentado a los míos
el tema de la ayuda externa, que únicamente quiero recibir lo que me facilita
la organización, que creo que lo conveniente es la igualdad entre todos los
corredores, sin ayudas de familiares, amigos o equipos pero yo comprendo que en
esos momentos de nervios quieren ayudar en lo máximo posible y no son
conscientes que mi mayor ayuda externa es que estén ellos allí, animando,
siguiendo la carrera, yendo de avituallamiento en avituallamiento, buscando el
mayor número de lugares donde verme, calculando si les dará tiempo de ir de un
sitio a otro… No necesito que me llevéis geles, ni barritas, ni zapatillas a
los avituallamientos, no necesito que rellenéis los botellines de agua o de
isotónico o que me deis o quitéis los bastones dependiendo del tramo de carrera al que me enfrente, de todo eso ya me encargo yo,
pero sí me vale, me ayuda, me motiva y me empujan vuestros ánimos, vuestras
palabras, vuestros consejos y en muchos casos vuestras miradas y gestos porque
en ocasiones la emoción hace que no os salgan las palabras, lo sé, esa es la mayor
ayuda externa.
Después de este lapsus, Eneritz me informa que
Josep se ha perdido, ha atajado sin querer y le han penalizado 10 minutos.
Cojo un trozo de plátano, lleno agua y a seguir con la tarea. Javi me
acompaña unos metros dando unos consejos e información.
Tiro para adelante y de repente, upss!!! ostras!!! (por no decir más), si no he
cogido todas las barritas, geles, sándwich, magnesio, isotónico… que tenía en
mi mochila de corredor, vuelta para el avituallamiento sin dudarlo. Entro, cojo la
bolsa donde tengo todo metido en otra bolsa de plástico y salgo con ella en cuestión de segundo
con la mirada perpleja de muchos de los presentes. Uff, menos mal que me he
dado cuento, ese error me hubiese costado la carrera.
La
situación de carrera no varía mucho, Josep no presenta muestras de flaqueza, me
saca 17 minutos, por detrás los asturianos han pinchado un poco, lo cual me
tranquiliza bastante pero ahora el tercer clasificado es Imanol, que aunque le
saque 20 minutos, no me fío.
Las sensaciones son buenas, la situación de
carrera me gusta, todavía queda mucho pero me vienen a la cabeza todas esas
veces que me he metido a la cama soñando con ser Campeón de Euskal Herria de
Ultrastrails, en la situación en la que estoy lo veo viable, lo veo factible
pero es elemental no fallar, regular, comer, beber… pienso para mis adentros,
venga un empujón más, subimos Ubieta y
en la bajada ya estamos en el 68 km y solo
quedarían 20.
Con esos pensamientos y esa ilusión hago cima
y tiro para abajo con muchas ganas de llegar a Güeñes, me encuentro muy bien y
creo que a estas alturas de carrera tanto por adelante como por atrás se
empezará a notar los kilómetros, a partir de aquí quiero empezar a apretar un
poco más si puedo, quiero ir un poco más de los que es un ritmo cómodo.
Llego a Güeñes, km 68, 7 h 50 min, bastante
gente o esa impresión me da, la segunda tanda de la hinchada ha llegado, ya que
le veo a mi ama adelantada dubitativa de si el que viene a lo lejos es su hijo
o no:
“Gaizka!!! eres tu???” me grita a lo lejos.
Noto que la gente me pregunta cosas pero no
contesto, yo voy a la mío, trozo de plátano y rellenar agua, no necesito más,
lo demás ya lo llevo yo.
Es curioso porque en ese momento estoy en una burbuja,
la señora del avituallamiento me dice a ver si quiero un sándwich de chorizo
por miedo a que su trabajo de toda la mañana haciendo triángulos quede en vano,
Oscar el organizador de la carrera me pregunta a ver que tal todo, Dani
compañero de equipo me comenta algo, pero estoy en una burbuja en la que oigo
pero no hago caso (pido disculpas) aunque en todo ese barullo de fondo le oigo
a Eneritz, seguramente en un tono de voz más bajo, más sigiloso pero
inconscientemente levanto la cabeza y presto atención.
“No te obsesiones con el de adelante, tu
carrera esta atrás” me habla Eneritz mientras salgo del avituallamiento conocedora de mi gran sueño.
68 km en las patas y me encuentro bien,
suelto, con ganas, sé que me tengo que concentrar muy mucho en la alimentación
y en la hidratación, por ello lo llevo a rajatabla. Creo que es momento de
apretar un poco, de subir un punto, de apretar los dientes. No sé qué me
obsesiona más, recortarle minutos a Josep o sacarle más ventaja a Imanol.
Tiro para arriba para afrontar el ascenso al Luxar y Aldape, unos 700 m + en 7 km. Lo que sobre el gráfico, en casa, tumbado en el sofá,
con la manta encima parece sencillo y fácil, cuando llevas 70 km no se ve igual,
no se porque jejeje.
Algunos voluntarios que me facilitan referencias,
me desaniman un poco, después del esfuerzo de subir un punto me comunican que Josep ha ampliado la ventaja y me saca 19 min. El desanimo no solo es por no haberle
recortado minutos sino porque quizás por atrás me están recortando a mí. No
pasan ni 200 m cuando un espectador me dice que me saca 13 min:
“Pero si me acaban de decir ahí abajo que son
19” le comento.
“Son 13, seguro” me reitera.
|
Foto de Ikar |
Bien, bien, bien, pienso para mis adentros y tiro
para abajo después de hacer cima en Aldape.
5 km de descenso y ya estaré en el 80, los km
empiezan a pesar pero el terreno es favorable, pienso que en estos tramos puedo
recortar distancia y ampliar por atrás, los dos frentes están abiertos y tanto
en uno como en el otro todavía no hay nada asegurado.
Necesito referencias ciertas, sobretodo con
los de atrás, quiero tener la tranquilidad de que no me están recortando, de
que mantengo los 20 minutos, si en el 80 se mantiene la distancia sería muy
difícil perder la segunda posición.
Llego al 80, 9 h 48 min, no están los míos, me
da un poco bajón, les pregunto a los del avituallamiento a ver si saben cuanto le saco al de atrás, mi
obsesión es tal que ni le pregunto por el primero.
Tiro para adelante con el único pensamiento de
que me quedan 8 km, 4 de subida y 4 de bajada. En este ultimo monte que da
nombre a la carrera, Apuko, sé que el repecho final es de los de mandar a tomar
por culo a este deporte pero como aspecto positivo hay que decir que esta muy
bien para tomar referencias, esto es, si hago cima en Apuko y no veo al tercero
que ha empezado a subir el último tramo, tengo una ventaja considerable como
para tomarme el descenso con tranquilidad, así que ya no pienso en 8 km sino en
4.
Se hacen duros, largos, pesados, lentos estos
últimos km, le doy mil vueltas a la cabeza,
no entiendo que les habrá podido pasar a los míos para no llegar al avituallamiento del km
80, les necesitaba más que nunca, vueltas y vueltas a la cabeza cuando de
repente me doy cuenta, coño!!! ellos no iban a estar en el 80 sino en el 83,
ultimo control. Ojala que sea así, solo pienso en eso, me motivo, pienso en
llegar al 83 y esta hecho, venga Gaizka.
Estoy deseando de que me informen de que el
primero me saca 25 minutos y el tercero esta a otros tantos, de esta manera me
podre tomar con calma estos últimos kilómetros.
Voy por un senderito pequeño entre zarzas con
una pendiente pronunciada o eso me parece a mi a estas altura de carrera, de
repente levanto la cabeza y le veo a Javi:
“Le has adelantado al primero o qué?” Me
pregunta sorprendido.
“No” le contesto justo justo sin mucha energía.
“Pues algo le habrá pasado, venga que vas
primero” me grita excitado.
“Que no cojones, que habrá pasado hace 20
minutos igual” le contesto sin mucho aliento.
“Que no ostias, que llevo aquí una hora, venga
dale que vas a ganar” me anima inquieto.
Joder, joder, joder, madre mía, madre mía,
madre mía pienso para mis adentros porque para fuera no tengo fuerza para
expresarme.
La hinchada esta unos metros más arriba:
“Animo Gaizka, venga Txapel que vas primero”
me animan y gritan. Están todos: mis aitas, mi hermano, Eneritz, Ángel, Maribel,
Maite y los geme. Creo que mi cara, mi rostro, mi gesto, deja claro que no puedo
más, que apenas les digo nada, que solo miro medio metro más adelante y voy
poco a poco ascendiendo esta última pala del Apuko ayudado de mis inseparable
palos.
“Txapel, se ha perdido el primero, en el ultimo
control (km 80) le sacabas 5 min” me informa mi hermano Iñigo mientras continuo
el ascenso.
“5 min, mierda” grito pensando que con esa
diferencia estos últimos km no van a ser tranquilos.
Braceo, aprieto, balanceo la cabeza en busca
del último esfuerzo, pienso en que cuando haga cima, si no le veo a Josep esta
hecho, cada poco miro para atrás con esperanza de no ver a un corredor con
camiseta roja.
Hago cima, miro para atrás, no hay nadie, sí,
joder sí. Pico el reloj, 7 minutos 36 segundos, ese es por lo menos el tiempo
que le saco. Me quedan 4 km cuesta abajo, es imposible que me coja, ya esta
hecho, no me lo creo.
|
Foto de Urko Villabuena |
El descenso no es para nada sencillo pero paso
los minutos intentando darme cuenta de lo que voy a conseguir. Saco la txapela,
todavía quedará kilómetro y medio pero empiezo ya con los preparativos para ver
si se me pasa más rápido estos últimos kilómetros, quiero llegar ya, lo estoy
rozando, lo acaricio con los dedos, me adentro en el último bosque, ya esta, ya
no queda nada, txapela, dorsal a la vista, camiseta por fuera, todo en orden. Le
oigo a Depa (speaker) que ya avisa de mi llegada, salgo del bosque y ya esta la
meta ahí, sí coño sí, voy con los brazos en alto, animo al público, les grito,
últimos metros, abrazo a mi ama, cojo a mis sobrinos, choco la pala con mi
aita, ya estoy en meta, ahí esta Eneritz, le abrazo, sííííííííí!!!!!!!!,
conseguido, soy el primer Campeón de Euskal Herria de Carreras de Ultratrail,
increíble.
Son momentos de alegría, de incredibilidad, de
recoger lo sembrado, de recordar cuanto me ha costado llegar hasta aquí,
perdón, de cuanto NOS ha costado llegar hasta aquí, porque esta txapela no es
solo mía, es de mucha gente, de muchísima gente, no quiero dar nombres porque
vosotros ya sabéis quienes sois desde los que me animáis en las carreras sin conocerme,
hasta los que estáis más cerca de mi en el día a día, esta txapela es de todos
nosotros, eskerrik asko!!!
|
Foto de Vicentecontreras.com |
Joder, no puedo no dar nombres, con el perdón
de otros que debería de nombrar, tengo que agradecer muy especialmente a
Eneritz, Javi e Iñigo, eskerrik asko por aguantarme, apoyarme, animarme y preocuparos por mi en el día a día.
|
Podium de la carrera |
Podium:
Gaizka Barañano Urkijo 10:48:22
Josep Cuadrat Besa 11:10:10
Sergio Aramendia Etxabarri 11:20:41
PD: Gracias a Oscar (alma mater de la carrera), en particular y al pueblo de Zaramillo en general, . Bonita, dura (muy dura) y bien organizada carrera. En Zaramillo me siento querido, muy buena gente.
|
Con Depa (speaker) |