A las 9 de la mañana bajo un cielo nublado y un suelo mojado lanzan el cohete que da inicio a la carrera con 350 participantes de diferentes procedencias como Argentina, Estados Unidos, Portugal...
Primeros metros por carretera descendente, en los que se crea un grupo de 7 corredores que marcan un ritmo más exigente. Por detrás de estos, un par de corredores y yo marcamos distancias y servimos de enlace con el grueso del pelotón.
Dentro del primer km me sorprendo con la presencia de la hinchada amurriara. Saludos, aplausos y después de unos metros de ascenso por carretera nos adentramos en el monte.
Según van avanzando los km en ascenso al Artzamendi, adelanto corredores hasta llegar al tercer puesto donde solo en ocasiones veo al primer y segundo clasificado que ya me llevan una ventaja considerable.
Hacemos cima en el km 8 con un tiempo de 55 min. Nos disponemos a bajar por un terreno técnico y complicado, más aun con el terreno mojado por las lluvias caídas en la noche anterior y con una parte final con una pendiente de 35%. Por momentos, me apena estar en una carrera y no poder pararme a disfrutar del precioso paisaje del que nos deleitan las montañas de Lapurdi. Las diferentes tonalidades de los verdes, las abruptas montañas difuminadas por las nubes bajas y esta húmeda mañana de la que podemos disfrutar, hace que desconecte por momentos de la carrera.
La situación es inmejorable, el disfrute con el paisaje solo lo mejora el divertido camino a través de estrechos senderos en muchos casos pedregoso que hace que en más de una ocasión roce ver el suelo de más cerca de lo debido. Cuando estamos a escasos metros de llegar al km 16, donde se acaba el descenso y espero que esté la hinchada, veo al segundo clasificado que baja dubitativo. Lejos de obsesionarme con alcanzarle ,sigo disfrutando del descenso a mi ritmo hasta alcanzarle sin mucho esfuerzo. No entiendo el motivo por el que va tan despacio, o ha pegado petardazo o tiene más miedo a bajar que los barman a Mila Ximenez.
Le alcanzo, va bastante lento, descendemos por un estrecho camino entre helechos que si no me deja paso, no le puedo adelantar. Sera cabron !!!, no me deja paso, joder, no me jodas. En una curva me arriesgo un poco y me meto por el interior adelantándole y tiro para abajo.
Pasamos por un puente y de seguido llego al avituallamiento donde estan los míos. "Venga Gaizka!!!, Aupa Txapel!!!", sorprendidos es poco lo que están con mi puesto. En estos momentos voy segundo y dicha emoción hace que mi ama obstaculice la visibilidad de un cámara de televisión. “Que tal vas?”, me preguntan, “Bien” contesto mientras aprovecho para coger unatrozo de naranja, plátano y agua. “A cuanto esta el primero?” le pregunto a Eneritz. Eneritz le mira a su aita y me dice Ángel, “ a 4 minutos y pico”. “Buff, ni lo pienso” les contesto mientras continuo con la carrera entre animos y aplausos.
Ahora hay que tomárselo con tranquilidad, llevamos 1 hora 37 min de carrera y nos enfrentamos a la ascensión del Goramendi, 5 km de ascenso en los que vamos a subir 800 m para luego bajar un poco y volver a subir hasta la cima.
En los primeros metros de ascenso se me pega el que luego me entero que es un portugués. Lejos de pagarle con la misma moneda, le dejo paso a la primera de cambio. Ni me preocupa, ni me obsesiono con seguirle, sino que procuro hacer mi carrera e ir a mi ritmo, ya que todavía queda mucha carrera y la pendiente en algunos casos en esta parte llega al 40%, así que poliki, poliki.
Seguimos ascendiendo hacia el Goramendi por un afilado cresterio en el que al lado derecho flota un mar de nubes, al contrario de lo que sucede en lado izquierdo con el que desconecto por momentos de la carrera reteniendo imágenes en la cabeza que serán difíciles de olvidar, precioso.
La visibilidad alcanza hasta prácticamente la cima, por lo que veo al primer y segundo clasificado por delante ya casi haciendo cima y lo mismo sucede con el cuarto clasificado pero por detrás.
Las fuerzas flaquean y el agua escasea, se me ha acabado el liquido que llevaba en el bidón. Noto como estoy falto de energía en estos últimos metros de ascenso y sin agua no quiero tomarme un gel que tengo en la riñonera. Unos metros antes de hacer cima con una niebla densa veo a lo lejos el avituallamiento "venga Gaizka, no has aguantado al portugués en la subida?", me comenta Simon, miembro de la organización que en el km 16 ha hecho migas con la afición de Amurrio. "Ha subido muy fuerte" le comento.
Me lleno el botellín, como plátano, naranja, ciruelas pasas y tiro para abajo entre la niebla. Poco a poco voy comiendo, hidratándome y tomo un gel. En menos de diez minutos ya noto los efectos y vuelvo a ser el que debería. Caña, que estoy como nuevo.
Divertido, contento y con fuerza entre bosques, senderos y campas avanza la carrera sin variaciones en cuanto a la posición.
Me encuentro muy bien y en breve nos enfrentamos a la ultima cima, Iparla en el km 35. Me consta que por delante no tengo nada que hacer, me sacan 8 minutos, así que tengo que hacer la carrera por mi cuenta. Llegamos al 32, km en el que tenía planeado meterme el ultimo "chuletón de Irún" vamos, geles de Forum. Me pongo la servilleta, primer plato, un gel, agua, segundo plato, otro gel y cañaaaaaaaaaa!!!!!!!
La concentración en la carrera es tal que me doy cuenta que no me había dado cuenta, valga la redundancia, que lleva unos minutos lloviendo.
Ya queda poco para coronar, la niebla persiste, de vez en cuando miro para atrás por miedo al cuarto clasificado. Desgraciadamente, ahí viene, cagüen zotz!!!
Nunca había estado en esta tesitura y la estrategia es clara, no tengo intención de tirar para adelante y cada 200 m estar mirando atrás para ver si le he sacado algún metro. Voy a dejarme coger y que él coja la iniciativa, que él vaya primero, que marque el ritmo y que tenga que prestar atención de donde están las marcas del recorrido. De esta manera toda la presión recae sobre él.
Dicho y hecho, me alcanza y mientras íbamos trepando entre las rocas, me hago el despistado con las marcas y me adelanta. Perfecto, ahora solo tengo que aguantar su ritmo. Hacemos cima y para abajo.
No parece que sea ningún fenómeno en la bajada y el ritmo es más que accesible, de hecho por momentos me preocupa que nos alcance el quinto clasificado.
La cosa cambia, empieza a apretar, me saca unos 5 metros, venga Gaizka no te puede dejar, que no te vea flojear, si se me escapa ahora se va a venir a arriba y será difícil cogerle, venga Gaizka aguanta, hago de tripas corazón y le alcanzo de nuevo, uff menos mal.
Avanzan los km estamos en 38, salvo que se me vaya, por mi parte esto se va a decidir al sprint. Él, en todo momento va primero, yo no intento que no sea así, hasta que en una bajada pedregosa y estrecha, se cae, le adelanto. La bajada es técnica, la velocidad es rapida y no caer al suelo muchas veces es mas fruto de la fortuna que de la habilidad. Le intento probar a ver que tal va por zonas técnicas, aprieto un poco, por momentos solo veo piedras por todos lados, es momento de arriesgar, oigo que se queda unos metros pero me vuelve a alcanzar y de repente pum!!! al suelo, me adelanta y continuamos.
Nos caemos de maduros, quedan menos de 2 km y se palpa la tensión, vamos más rápido de lo que podemos y las piernas y los reflejos no están al 100%. Otra vez se cae, le adelanto, me adelanta, ultimo km.
Me concentro, hago unas cuantas respiraciones profundas, esto se va a decidir al esprint, no lo tengo nada claro de que vaya a ganar pero es lo que he buscado desde el km 34. Él va primero, ya tiene que quedar poco para que acabe el monte y empiece el asfalto. En un momento de lucidez creo conveniente empezar el asfalto primero, ya tiene que quedar poco para que acabe el monte, una curva cerrada, me arriesgo, me meto por el interior y cojo la delantera. La tensión se palpa, llegamos al asfalto, voy primero aunque me pisa los talones, el ritmo es agonico, veo que vienen dos cuestas para abajo muy empinadas, de repente le oigo a mi ama "Venga Gaizka", levanto la cabeza, no la veo pero veo a lo lejos después de una curva el arco de meta. El francés empieza a esprintar, le oigo como estamos casi a la par, aprieto lo más que puedo "Gaizka zapatea", grita mi ama, aprieto los dientes. Estamos a la par cuando pasamos por delante de mi ama, quedan 100 m, curva y otros 100 m y meta. Aprieto, este ritmo no lo puedo aguantar hasta meta, no doy más de si, vamos a 24 km/h cuesta abajo. Parece que cede un metro, metro y medio, dos metros, curva, miro para atrás, ha tirado la toalla, siiiiiiiiiiiii !!!, no me lo creo, últimos 100 metros, los disfruto, los celebro, no quiero que se acaben, le veo a Eneritz, a mi aita a Maribel, levanto los brazos, me llevo las manos a la cabeza, me pongo a andar por la alfombra roja y meta en tercera posición con un tiempo de 4 horas 54 minutos, increíble (vamos su puro significado, increíble = no me lo creo).
Al fondo de la meta esta Ángel como uno más de los reporteros gráficos. Le saludo al 4º clasificado y voy donde Ángel. No puedo hablar, estoy agotado pero feliz. Van llegando aita, ama, Maribel y Eneritz, felicitaciones, abrazos pero durante los primeros minutos no hay palabras, no puedo.
Alucinante, que emoción, estratégicamente perfecto y muy, muy contento. Voy a subir por primera vez al pódium.
Todavía sin recuperar el aliento, me ponen la alcachofa en la boca. Estamos en iparralde, así que lo más lógico es que se haga en francés o en euskera. Me decanto por la lengua milenaria poniendo en práctica la pegatina del Araba Euskaraz "habla en euskera aunque no tengas ni puta idea" y así fue. Ni corto ni perezoso me lance con la entrevista. Perdón por los hachazos pero entre la falta de oxigeno en mi cabeza y mi nivel de euskaldizacion pues...
Después de la necesaria ducha y el deseado masaje comimos en el bonito trinkete de Bidarrai a la espera de la entrega de premios.
Quiero dedicar este tercer puesto a mucha gente. A los que hacen posible esta carrera, a los aficionados que animan, a los que se interesan por mis carreras, a los que me preguntan, a los anónimos seguidores del blog y los no anónimos y como no, a la hinchada incombustible y a quien tiene que aguantarme todos los días.
Eskerrik asko guztioei !!!
PD: Mensaje a todo corredor de montaña, la maratón de Bidarrai es obligatoria, os la recomiendo.
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. Llego a la punta del Aizkorri con Luis a escasos metros de mi, a Iker ni le vemos, y ahora nos espera una bajada muy tecnica llena de piedras,esta es la mía. Nada mas empezar, ya le empiezo a meter metros y esto seguira asi hasta el final de la carrera.
