Miguel Heras ha completado una temporada fantástica. Ha sumado victoria tras victoria, alzándose con títulos tan importantes como la Transgrancanaria o Cavalls del Vent, cerrando un 2010 de ensueño al vencer en las 50 Millas de San Francisco.Tras sólo dos años compitiendo en carreras por montaña, Miguel Heras ha demostrado una gran capacidad de adaptación al medio. Procedente de los raids de aventura, ha conseguido unos magníficos resultados en este año que acaba. En Desnivel hemos querido hacer con él un repaso de estos doce meses con sabor a victoria.
¿Qué valoración haces de la temporada de 2010? ¿Ha sido tu mejor año?
En el mundo de carreras por montaña seguro. Llevo un par de años dedicándome en exclusiva a las carreras a pie, y al principio siempre cuesta un poco. Pero el trabajo de años anteriores, la experiencia y algo de suerte han hecho que mi año haya sido casi perfecto. Ha habido carreras muy importantes que ni yo esperaba ganar, lo que me hace estar muy contento.
¿Cuál ha sido tu victoria más especial?
Pues en un principio fue mi victoria en Cavalls del Vent, por las circunstancias de la carrera. No tenía claro que podía ganar, y cuando llegué a meta y gané, me puse muy feliz. Pero me quedo con la carrera de San Francisco, porque fue la más difícil de ganar. No tenía buenas sensaciones y gracias al sacrificio y al esfuerzo pude alcanzar la victoria.
Menudo broche para la temporada.
Sí. En principio no iba a ir. Me ofrecieron esta posibilidad. Alargué un poco la temporada y conseguí ganar esta carrera, que por otra parte, es muy diferente a las que corremos en Europa.
¿Y cuál ha sido la espinita de este 2010?
Pues el Ultra Trail Mont Blanc. Estaba metido con Kilian en el meollo, tenía mucha ilusión, sobre todo por el error del año pasado, cuando me perdí. Este año lo preparé bastante bien, incluso fui a reconocer el recorrido con Kilian, pero al final sólo pudimos hacer los 35 kilómetros que nos permitió el tiempo.
¿Por qué crees que hay tantos corredores de calidad en España?
Creo que la clave es la afición que hay en España. Cuantos más corredores haya, más posibilidades hay de que salgan buenos corredores. En Italia pasa algo parecido, gracias a la afición y a la cantidad de gente que se anima a correr por montaña.
¿Cuáles son tus fechas marcadas en rojo para 2011?
Hemos estado confeccionando el calendario con los responsables de Salomon. Las principales carreras van a ser la de Fuji, en Japón, el Mont Blanc; también quiero intentar alguna prueba de la Copa del Mundo, como la Sentiero de la Grigne. También me gustaría volver a Cavalls del Vent y a San Francisco.
Tampoco me olvido de los trails de las islas Canarias, que son un entrenamiento perfecto, hace muy buena temperatura. El año pasado lo hice así y mira cómo ha salido todo.
Muchas de tus victorias son en lugares cálidos. ¿Crees que te favorecen las temperaturas altas?
Sinceramente no lo sé. El calor me gusta, aunque no sé si me va mejor que a los demás. Pero es que el frío no me viene mal. Vengo del mundo de los raids en los que las condiciones son de lo más duro, y al final te acostumbras a sufrir. Diría que me van bien los extremos, que haga mucho calor o mucho frío
¿Te planteas volver a los raids de aventura?
No lo quiero dejar. Me gusta, pero es muy complicado preparar toda la infraestructura, conseguir compañeros, etc. Hay muchas variantes que no dependen de ti. En el running depende más de ti mismo, de tus sensaciones y de tus entrenamientos. Pero los raids de aventura me gustan y además viene bien como entrenamiento para correr grandes distancias.
¿Cómo mantienes la forma durante el parón entre temporadas?
Este año, la temporada ha sido larga y prácticamente no he tenido un parón. Aún así no paro del todo, porque si no, luego me cuesta mucho. Por eso suelo salir a montar en BBT, esquí de montaña, salir a correr distancias no muy largas. No salgo todos los días, para descansar psicológicamente, pero sí cada dos días.
¿Y en plena temporada de competiciones?
Hasta ahora no he tenido entrenador, ni plan de entrenamiento. El tiempo del que dispongo es el tiempo que me deja mi trabajo, al que dedico muchas horas todos los días. No puedo seguir un entrenamiento específico porque ignoro cuánto tiempo le voy a poder dedicar. Intento entrenar todo el tiempo que puedo, o el que me dejan mi trabajo y mi familia.
¿Y la alimentación?
No me obsesiona. Mantengo unas pautas basadas en comer de forma equilibrada, sin abusar de azúcares. No tengo ninguna forma especial de alimentación.
¿Cómo compatibilizas trabajo y competición?
No es fácil. Soy autónomo y puedo disponer del tiempo que necesito, pero sin abusar, porque si no trabajo, no ingreso. Además, a veces tienes compromisos con clientes que no puedes dejar de lado. Hago de tripas corazón para sacar un rato para entrenar, para competir, para la familia… pero cuando algo quieres, tienes que luchar por ello.
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